lunes, 11 de enero de 2016

Reseña y resumen de "¿Hacienda somos todos?"

No, no es sólo la frase del día. Y tampoco, tampoco es sólo el mítico slogan de la Agencia Tributaria. "¿Hacienda somos todos?" es el título del libro en el que Francisco de la Torre explica, en base a su experiencia como Inspector de Hacienda, los que considera son los errores de nuestro sistema fiscal y las soluciones para corregirlos. Os animo a leerlo y, como incentivo, os dejo un resumen del mismo en 50 tweets:




























domingo, 10 de enero de 2016

Una persona, un voto. También en Cataluña

Hace unos días pedíamos en este blog "Una persona, un voto" para la elección de los diputados del Congreso, y explicábamos cuál hubiera sido el resultado de las elecciones del 20D si los españoles hubiéramos contado con un sistema electoral justo, en el que todos los votos valiesen lo mismo. 

Como no puede ser de otra forma, lo que pedíamos para el conjunto de España, lo pedimos para las CCAA, municipios, y cualquier otro ámbito en el que se vote en democracia. También, por supuesto, para Cataluña. Más para esta última, si cabe, por el carácter plebiscitario que muchos dieron a sus pasadas elecciones.

Veamos pues cómo se votó el 27S, cómo se tradujo en escaños en el Parlament, y cómo se hubiese traducido si los catalanes hubieran disfrutado de una ley electoral justa

Para empezar, en la siguiente tabla vemos las diferencias entre el porcentaje de votos recibidos y el porcentaje de escaños obtenidos:

Tabla hecha para @1persona1votoEnlace al tweet.
¿Lo más destacable? El hecho de que la lista más votada, Junts pel sí, se vea sobrerrepresentada en casi un 6,5%. Y la consecuencia más sonada estos días: cómo la suma de JxSí y la CUP consigue el 53,34% de los escaños con solo el 47,74% de los votos.

Otro consecuencia increíble del actual sistema es que partidos como Unió, con 102.870 votos, se queden fuera del Parlament. A pesar de que esos más de 100.000 votos suponen casi 4 veces lo que le cuesta cada diputado a JxSí, como vemos en la siguiente tabla: 

Datos recogidos para @1persona1votoEnlace al tweet.
Pero, ¿por qué se da esta falta de proporcionalidad? Por 3 de las claves del actual sistema electoral nacional, que es por el que se rigen las elecciones catalanas al no haber desarrollado nunca el Parlament una ley electoral propia, como sí han hecho el resto de las CCAA. Esas tres claves son:

  • La división del territorio en 4 circunscripciones. De forma que tu voto tiene más o menos valor en función de dónde lo efectúes: Mientras que un escaño de Lérida representa a poco más de 20.000 votos, uno escogido en Barcelona supone casi 50.000.
  • La fórmula electoral elegida, el sistema D'Hondt. No, no es una ley. Y no, no es el mayor culpable de la desproporcionalidad actual. De hecho, de las diferentes fórmulas electorales ésta es de las del grupo de 'proporcionales', aunque favorece en parte a los partidos más votados.
  • El límite de entrada del 3% (Mientras que cada escaño representaría al 0,74% del electorado -basta dividir 100% entre 135 escaños-, el sistema no permite entrar al Parlament a los que no hayan conseguido al menos el 3% de los votos).
Y ahora lo más importante: ¿cómo habría quedado el Parlament tras las elecciones del 27S si todos los votos valiesen lo mismo?



Junts pel sí tendría 8 diputados menos, el PSC tendría 2 más y CSQSP, el PP y la CUP sumarían un diputado más cada uno. Además, Unió entraría con 3 diputados. Y lo que es más relevante en el actual contexto político: JxSí y la CUP sumarían solo 65 escaños, por lo que no tendrían mayoría absoluta.



Finalmente, una breve explicación de cómo se ha realizado el cálculo para que todos los votos valgan lo mismo: Como explica la biografía de la cuenta @1persona1voto, se consigue con las cuatro siguientes variables: 
  • Circunscripción única. Implica una misma lista para todo el territorio catalán y que el hecho de votar en una parte u otra del mismo no genere diferencias. Es la que se utiliza en Madrid o, tras un reciente cambio, en Murcia.
  • Cociente Hare. Es la más proporcional de las fórmulas electorales. Divide el número total de votos válidos entre el número de escaños a repartir y los va asignando a los partidos que los hayan obtenido. Finalmente, cuando a ninguno le quedan votos suficientes para llegar al mismo, se los asigna a aquellos que más votos le queden, en lo que se conoce como el 'método del resto mayor'.
  • Límite de entrada resultado de dividir el 100% de los votos entre el número de escaños a repartir. Para que ningún partido minoritario (¿radical?) consiga un escaño por el método del resto mayor se pone este límite. Mientras que el límite actual para entrar en el Parlament es el 3%, el límite de #1persona1voto sería el 0,74% (100% votos entre 135 escaños).
  • Voto en blanco computable. Consiste en dejar vacíos los escaños correspondientes a los votos en blanco. En el caso del 27S, como estos se quedaron en el 0,53%, lejos del 0,74% que representa cada escaño, no correspondería.
Con los datos de las elecciones del 27 de septiembre el cálculo sería: 
  1. Se contabilizaron un total de 4.099.875 votos válidos entre todos los electores, independientemente de donde residan. 
  2. Al dividir el total de votos válidos entre los 135 escaños a repartir tenemos que cada escaño equivale a 30.369 votos.
  3. 7 partidos superan dicho umbral. El número total de votos válidos a dichos 7 es de 4.032.275, por lo que cada escaño pasa a suponer 29.869 votos.
  4. Asignando un escaño por cada 29.869 votos repartimos 132 escaños. Los 3 restantes los asignamos a aquellas opciones que se han quedado con más votos de 'resto', en este caso PPC, C's y PSC.
Exige una democracia real. No votes a aquellos partidos que no se comprometan a avanzar en la proporcionalidad del sistema electoral. Sigue a @1persona1voto y comparte.